El crecimiento económico de España en el segundo trimestre supera las estimaciones
España experimentó un crecimiento económico del 0,5% en el segundo trimestre, superando las estimaciones previas del mes de julio. Aunque este crecimiento representa una leve desaceleración en comparación con el trimestre anterior, muestra una sólida recuperación de la economía tras los impactos de la pandemia.
El crecimiento se basa principalmente en la demanda interna, especialmente en el consumo de las familias, que aumentó un 0,9% en comparación con el trimestre anterior. Además, la inversión empresarial también mostró un incremento del 1,9%.
Sin embargo, la demanda externa tuvo un impacto negativo en el crecimiento económico. Las exportaciones disminuyeron un 3,2% y las importaciones bajaron un 2,1% en el segundo trimestre.
En cuanto a los sectores económicos, el sector de servicios y la construcción fueron los principales impulsores del crecimiento, aumentando un 0,9%. Por el contrario, el sector agrícola y la industria experimentaron un descenso en su producción.
El empleo también mostró signos positivos, con un aumento del 1,5% en las horas trabajadas. En el último año, se crearon 576.000 puestos de trabajo equivalentes a tiempo completo, lo que indica una mejora en el mercado laboral.
En términos de PIB, España registró un crecimiento del 2,2% en comparación con el segundo trimestre de 2022. Aunque la renta nacional bruta y la renta nacional disponible bruta descendieron en comparación con el primer trimestre, ambas cifras aumentaron en comparación con el segundo trimestre del año pasado.
En cuanto a la remuneración de los asalariados y el excedente de explotación bruto/renta mixta bruta, se observaron incrementos significativos. La remuneración de los asalariados aumentó un 8,6% en el segundo trimestre, mientras que el excedente de explotación bruto/renta mixta bruta experimentó un crecimiento del 9,6% en comparación con el año anterior.
En resumen, España ha logrado un crecimiento económico mayor al esperado en el segundo trimestre, impulsado por la demanda interna. Aunque las cifras de exportación e importación sufrieron un descenso, el sector de servicios y la construcción demostraron ser motores clave de esta recuperación económica. Asimismo, el mercado laboral mostró mejoras significativas, con un incremento en el empleo y la creación de nuevos puestos de trabajo.
