Una multitud se reunió en Berlín para recordar a Alexéi Navalni, opositor ruso fallecido en prisión. Los rumores sobre un coágulo sanguíneo mortal como causa de su muerte inicial fueron desmentidos al encontrar hematomas por convulsiones en su cadáver.
Según información de un preso, todos los reclusos fueron obligados a encerrarse la noche anterior al fallecimiento de Navalni. Su familia intentó reclamar los restos mortales sin éxito, hasta que el cuerpo fue encontrado en una morgue de un hospital a 50 km de la prisión.
Las autoridades se niegan a entregar el cadáver a la familia hasta que finalice la investigación, lo que podría retrasar la autopsia ya que se espera la llegada de forenses de Moscú. Navalni tenía problemas de salud debido a un envenenamiento en 2020.
Las dudas sobre la causa de la muerte del opositor han llevado a versiones contradictorias, con la oposición y la prensa independiente acusando a Putin de ordenar su asesinato. En su memoria, se han realizado actos y manifestaciones en Rusia y en el extranjero.
La viuda de Navalni asistirá a una reunión en Bruselas de ministros de Exteriores de la UE. Josep Borrell, Alto Representante de la UE para Asuntos Exteriores, atribuye la responsabilidad exclusiva de la muerte de Navalni a Putin.
